Ya ni me di cuenta...
Hace rato almorcé el sudor de una máquina.
Sentí el sabor a metal y caucho de la banda transportando la cajita de espaguettis desde "La Moderna" allá por Vícam hasta la pulpería de la esquina.
Probe la mano de Doña Fabi y la paila donde puso a freír los espaguettis y el pollo en su aceite de canola Goldenjíls.
Comí algo roto, también.